No hay nada más reconfortante que ver a tu perro dormir tranquilo, con las patitas estiradas y esa respiración lenta que solo aparece cuando está realmente cómodo. Pero ¿alguna vez te has detenido a pensar si su cama realmente le brinda el descanso que necesita?
Así como nosotros necesitamos un buen colchón para levantarnos renovados, ellos también. Y muchas veces, sin darnos cuenta, nuestras mascotas terminan durmiendo en lugares duros, incómodos o en camas que ya no les ofrecen el soporte necesario.
¿Qué deberías observar?
- Si se cambia de posición a cada rato o duerme poco.
- Si evita su cama y prefiere el suelo.
- Si despierta rígido o parece incómodo.
- Si la cama huele mal o ya está apelmazada.
Dormir bien no es un lujo. Es bienestar físico y emocional. Y sí, tú puedes ayudarlo con algo tan simple como darle un mejor espacio para descansar.

